¡Claro que sí! Usamos esta combinación cuando es inevitable administrar medicamentos alopáticos con poco margen terapéutico, ó en casos en que se pueden producir intoxicaciones con facilidad. Puede intentarse aquí un tratamiento homeopático para mejorar la tolerancia a dichos medicamentos. Ejemplos de estas situaciones en nuestra práctica diaria los tenemos en el uso de digitálicos en afecciones cardíacas, o en el de los anestésicos. Hay muchos otros, pero estos son los más frecuentes en nuestra experiencia.