¿ Y si la Homeopatía fuera la “Medicina Tradicional”?....

“...hay una sola y única medicina: la que cura, pero para llegar al resultado apetecido y necesario se requiere de una mente abierta y un espíritu no menos abierto y, sobre todo, dotado de la suficiente valentía para enfrentar la cultura dominante...”

Dr. Florencio Escardó

"La medicina es el arte de distraer al paciente, mientras la naturaleza lo va curando"

Edgar A. Torres

 

¿Una pregunta o un desafío para los Homeópatas?

Como Médicos Veterinarios tenemos la obligación de ofrecer a nuestros pacientes soluciones que se adecuen a sus necesidades y problemáticas.
En la curación de los animales enfermos, debemos aplicar dentro del abanico de posibilidades, la más adecuada para los mismos.
El paciente puede necesitar ser atendido por un cardiólogo, un traumatólogo, un cirujano, un oftalmólogo, etc... ¿y porqué no un homeópata?. Ya que la creciente especialización tecnológica de la medicina deriva generalmente en una fragmentación del animal en su tratamiento, podría pensarse también que siendo la Homeopatía otra especialidad sería también otra posibilidad de fragmentación. Sin embargo, a partir de la Homeopatía, cada enfermedad es vista como un problema del animal en su totalidad.
Debe quedar claro que la Homeopatía no es una “filosofía”, sino una medicina que tiene una filosofía basada en el vitalismo, que no podemos nunca dejar de lado.
Pero ante un problema clínico urgente, no hay duda que es necesario a veces tomar una conducta alopática para atacar en forma rápida el síntoma que hasta puede, en ocasiones, poner en peligro la vida del animal. Y si nuestra única misión es curar, no deberíamos rehusar a la aplicación de medicamentos alopáticos para evitar el sufrimiento innecesario del animal. El tratamiento homeopático puede coexistir con la medicación tradicional ya que su acción llega a una profundidad energética inalcanzable e incomprensible para los parámetros de la terapéutica alopática.
Otra opción rápida con “tinte alopático”, y muy útil en esos casos, es el uso de los complejos homeopáticos.
La problemática a la que nos enfrentamos muchos médicos veterinarios es que en la clínica diaria vemos alrededor de 10 a 20 animales por día y no hay tiempo para realizar una repertorización profunda para llegar al simillimum. Sumado a esto, muchas veces no tenemos datos de los animales que vamos a tratar.
¿Cómo podríamos entonces aplicar la Homeopatía a todos nuestros pacientes?
¿Porqué privarlos de los beneficios de este maravilloso sistema terapéutico?
Desde mis comienzos en la Homeopatía, este fue mi desafío, y para ello puse en práctica el consejo de un colega, el Profesor Dr. Jorge López Seco, “para parar una silla hacen falta tres patas: un síntoma mental, un general y un local bien modalizados. Esto alcanza para elegir el remedio”.

Quizás no se llega al remedio en todos los casos, pero si curamos el 50 % en la primera consulta ¿cuantos animales se habrán beneficiado con este sistema terapéutico? …Seguramente muchos más que siguiendo de manera rígida y ortodoxa los principios de la Homeopatía, anteponiendo la teoría al caso, olvidando que nuestra única misión es curar y reestablecer la salud de manera rápida, suave y permanente.
Además hoy podemos aprovechar la posibilidad que nos brindan las nuevas tecnologías. A través de la red Internet podemos repertorizar y curar a muchos animales que sufren y que por razones de distancia no pueden acercarse a nuestros consultorios.

 

Los tiempos han cambiado, la Homeopatía también...
El futuro está en nosotros. Hoy es el momento para dejar de lado los cuestionamientos por la forma de aplicar la Homeopatía y seguir creciendo para que cada vez más profesionales y más pacientes adhieran a esta ciencia y no seguir siendo “una elite” dentro de la medicina, y algún día, quizás algún día...la Homeopatía sea la Medicina Tradicional.

Un ejemplo de esta forma de practicar la Homeopatía que vengo empleando desde hace casi 20 años es el caso de una perra Pittbull de 5 meses de edad presentando “verrugas en la boca”.
Sus dueños llegan a la consulta en busca de otra opinión ya que no estaban convencidos de practicarle la exérecis indicada por otro colega. Luego de la revisación, diagnostico una papilomatosis oral y dada la urgencia del caso tomo los siguientes síntomas:

  1. Temor a los extraños (por el relato del propietario, ya que en la consulta se mostró muy afectuosa)
  2. Trastornos por vacunación (por estar recibiendo el plan de vacunación)
  3. Excrecencias húmedas (por el aspecto de las lesiones en la boca)

Prescribo Thuya 200, 10 glóbulos por día. En una semana desaparecieron las verrugas y actualmente, después de varios meses el animal se encuentra en perfecto estado de salud. Obsérvese en las imágenes el antes y el después.                          

Aunque Thuya no se encuentra presente en el capítulo de Boca, aprovecho este Congreso Virtual para poner a consideración de mis colegas el agregado del mismo, luego de haber curado varios casos como este. Si volamos un poco más alto, porque no pensar a partir de nuestras experiencias clínicas ir creando de una vez un repertorio veterinario...

 







     

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